Esta tarabilla se agrupaba antiguamente junto con la tarabilla común Saxicola torquata, tan común en nuestra fauna, pero recientemente se ha separado como especie distinta. Se puede reconocer por su gran mancha blanca en el cuello, los paneles alares blancos, y el vientre, que es bastante blanquecino, a diferencia de la tarabilla común que es muy rosado. Es probable que el ejemplar que observé pertenezca a la variedad presente en Armenia.
Una de las cosas que me llamó la atención es que el ejemplar estaba compartiendo territorio con una pareja de tarabilla común, sin que esta presentara ningún tipo de hostilidad. Se sabe que los machos de esta especie son muy territoriales, y expulsan a cualquier otro macho que se encuentre en las cercanías. Aquí pongo una foto del macho de esta pareja de Saxicola torquata para comparar.
Una buena parte de las citas de tarabilla siberiana en España son primaverales; es probable que estas aves lleguen en otoño o invierno como juveniles, y hasta que no muden al plumaje de adultos no sea fácil identificarlas.
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